Sabía de máquinas porque siempre tuvo que valerse de ellas para normalizar su vida y poder transmitir al mundo sus conocimientos. Pero, aún así, el físico Stephen Hawking no se fiaba de ellas.
Ver fuente
Sabía de máquinas porque siempre tuvo que valerse de ellas para normalizar su vida y poder transmitir al mundo sus conocimientos. Pero, aún así, el físico Stephen Hawking no se fiaba de ellas.