Mauro Libi Crestani tuiteó: 10 pasos para conseguir el éxito personal y empresarial

El economista Mauro Libi Crestani acaba de leer:

Pese a ser emprendedor y estar más que acostumbrado a tratar con ellos como partner y formador en Coorporate Yachting, empresa dedicada a la formación de directivos, Javier Iriondo insiste en decir que él no habla de negocios. Su primer libro, “Donde los sueños te lleven”, va por la vigésimo segunda edición y se ha distribuido en más de 20 países. Sin embargo a su tercer título, “Los 10 pasos hacia tu cima personal”, editado Zenith, del grupo planeta, le está constando más arrancar. Tal vez sea porque, convencido de que las intenciones sirven de poco si no se pasa a la acción, lo que hace ahora es poner deberes.

Emprendedores: ¿Vende eso de poner deberes a los lectores?

Javier Iriondo: Desde luego no es, ni mucho menos, lo más comercial. Parece que la gente quiere que le arregles la vida en un twitt. Les gusta conocer la teoría, pero cuando les pides el esfuerzo, la cosa cambia. Con este libro intento proporcionar algunas claves para comprendernos mejor. Pero, ya desde el principio, advierto de que la mala noticia es que son ellos quienes tienen que recorrer ese camino. Algunos siguen leyendo e intentan integrarlo, pero otros, en cuanto ven los ejercicios, salen corriendo, se bloquean y huyen”

Emp: Pues si es un camino que se recorre en solitario, ¿qué aporta Javier Iriondo?

J.I.: “Primero, que no soy gurú ni guía de nadie. No soy ejemplo de nada, ni tengo todas las respuestas. El libro está ahí para quien quiera cogerlo, para quien esté interesado en despertar algo dormido, pero está claro que no se puede ayudar a nadie que no quiera que le ayuden. Yo creo que cada uno tiene su momento, sueños maravillosos y, en el 80% de los casos, los descubrimos a través del dolor, cuando llega el sufrimiento.

La ley de Pareto

Para Javier Iriondo se cumple, con demasiada frecuencia, el principio de Pareto, la regla del 80-20. Sólo un 20% de arrepiente de lo que hace, frente a un 80% que lamenta lo que no ha hecho; el conocimiento tiene una influencia del 20% sobre los resultados, mientras que el 80% tiene que ver con la inteligencia emocional, con la capacidad de mantener la motivación y la perseverancia.

Emp: ¿Y cómo se aplica todo eso a la empresa?

J.I.:Las empresas son personas. Tanto quienes las lideran como quienes trabajan en ellas, igual que los clientes. El problema es que, a veces, nos olvidamos de humanizarlas. Los emprendedores tampoco están libres del desarrollo personal. ¿Acaso con la crisis no ha habido suicidios de empresarios de éxito por sentir que han perdido su identidad al arruinarse? No les ha importado nada, ni familia, ni hijos, sólo que el banco ha dejado de creer en ellos. Eso es una cabronada. Aclarar, también, que no tengo nada en contra del dinero, pero sabiendo que sólo su posesión no te va a dar la felicidad. Ojalá ganase billones para contribuir a la felicidad de muchos.

Emp: Y de los 10 pasos ¿cuáles serían más útiles a los emprendedores?

J.I.:Todos, tal cual están en el libro. Primero, en un ejercicio de introspección, tienen que poner en orden las prioridades y, luego, pasar a la acción con el foco ya definido. A veces nuestra atención se desvía y perdemos el enfoque de lo que es importante, de lo que de verdad nos motiva. Esto, además de ser un enorme ladrón de productividad, con unas consecuencias económicas negativas muy claras, tiene también un alto coste emocional porque nos sentimos sin control y a la deriva. 

Emp: En el paso número 6 habla de la necesidad de descubrir al enemigo. ¿Cómo lo descubre un emprendedor?

J.I.: Descubriendo, primero, los que lleva dentro. El más habitual es el miedo, que es lo que nos impide avanzar, pese a ser el mayor obstáculo para alcanzar el éxito y el bienestar emocional. La única vía para reducirlo es enfrentándonos a él y analizar las consecuencias de no hacer aquello que tememos. Muchas empresas se quedan paralizadas por el miedo y se olvidan de añadir valor, de la necesidad de diferenciarse del enemigo, de explorar nuevas vías en las que, tal vez pierdas dinero y seguridad, pero también puedes ganar y, lo que es seguro, es que aprenderás por el camino. El nombre del juego es no relajarse, ser flexible y moverse con agilidad. Hay que ver el cambio como un amigo, no como a un enemigo.

Crecer como el bambú

Habla también Javier Iriondo en su libro sobre los mapas mentales definiéndolos como creencias establecidas en nuestra mente sobre cómo creemos o asumimos que debería ser nuestra vida. Suelen establecerse de forma inconsciente, influidos por la educación, la familia, el pensamiento general…que nos va dictando lo que deberíamos haber conseguido a determinada edad. Terminamos comparando y, si no se cumplen las expectativas, provoca una sensación de vacío. Cambiar los mapas mentales implica deshacerse de condicionantes superficiales y dejar de exportar culpas.

"Significa contarte tu propia historia y definir el papel de su protagonista y, luego, trabajar hasta conseguir la identidad que quieres. Me refiero a las personas y también, antes de que me lo preguntes, a las empresas. Si tienes claro el papel que quieres asignar al protagonista de esa película, que puede ser la de tu propia vida o la de tu empresa, y trabajas para conseguirlo, al final llega. Aunque sea como el bambú, que lo riegas un año y no brota nada, un segundo, un tercero…y lo mismo, hasta que llega un día que rompe y crece de repente 35 cm. Entonces entiendes que estaba desarrollando unas raíces gigantescas. Esa visión a largo plazo es lo que parece que se está quedando atrás en la era del microondas. 



vía 10 pasos para conseguir el éxito personal y empresarial