El objetivo de estos premios es impulsar las ideas de mujeres que cuando se sienten bien son imparables. Eres Impulso nació para conseguir que esas ideas innovadoras avancen con la misma fuerza que el agua. Los proyectos ganadores de la Segunda Edición de Eres Impulso han sido Es im-perfect y AdaLab.
Es im-perfect se dedica a recuperar frutas y verduras que se van a desperdiciar. “Un 95% lo canalizamos a puntos de distribución de alimentos, para formar una alimentación sana y saludable, y el otro 5% restante lo transformamos en conservas de alta calidad, que se comercializan bajo la marca Es im-perfect”, explica Mireia Barba, fundadora junto a Marina Pons y Jordi Bruna, de Espigoladors, la empresa social que gestiona esta idea de negocio.
El objetivo que se han marcado “es concienciar que la fruta y verdura imperfecta es igual de buena que la perfecta, así como dar sostenibilidad a un modelo de recuperación de alimentos frescos”. La idea surge –recuerda Barba– de un problema y una oportunidad: “Las cifras del desperdicio alimentario son escandalosas; personas en situación vulnerable que no tienen acceso a una alimentación saludable; tasas de obesidad debido a una mala alimentación que afectan a adultos y niños; la necesidad de concienciar sobre el despilfarro de una manera práctica y directa, y la necesidad de construir modelos sostenibles para que sean perdurables en el tiempo. A partir de aquí, estudiamos modelos que estaban funcionando a nivel internacional y creamos uno adaptado a nuestro territorio. Es im-perfect va más allá de la elaboración de conservas naturales, artesanales y de calidad, es un modelo transformador en la lucha contra el despilfarro alimentario”. A corto plazo, prevén la construcción de una cocina central en El Prat de Llobregat (Barcelona) y, a medio plazo, “expandir y escalar la marca a todo el territorio español a través de réplicas de nuestra organización”.
Mujeres con talento
AdaLab se centra en crear diversidad en el sector digital impulsando a mujeres jóvenes con talento, pero de zonas con pocas oportunidades, para que se conviertan en profesionales digitales y accedan a un futuro mejor. Para ello, “utilizamos una metodología muy simple, a través de la que creamos una red de empresas colaboradoras con las que identificamos los perfiles digitales que les cuesta cubrir y las competencias que necesitan”, subraya Inés Vázquez, cofundadora junto a Rosario Ortiz. Después, buscan y atraen talento femenino, “donde nadie más lo busca, identificando a mujeres comprometidas y motivadas que no han tenido la oportunidad de desarrollar todo su potencial. Nuestras alumnas reciben una formación intensiva y corta, muy orientada a la realidad laboral, que combina tanto formación técnica como el desarrollo de otras competencias profesionales para, finalmente, comenzar a trabajar en prácticas en las empresas de nuestra red”.
A lo largo de ese proceso, mujeres profesionales del sector de las tecnologías digitales actuan de mentoras de las alumnas y, alumnas ya graduadas hacen de mentoras de las promociones siguientes, “creando una comunidad cada vez más grande de mujeres profesionales que lideren el mundo digital”.
Reducir el desempleo
Con la idea de desarrollar un programa enfocado en reducir el desempleo juvenil, estas emprendedoras comenzaron analizando el mercado laboral español y detectaron una demanda cada vez mayor de nuevos perfiles, relacionados con las tecnologías digitales, que a las empresas les costaba cubrir por falta de candidatos adecuados. “Nos dimos cuenta de que no era un problema exclusivo de España, y que en otros países habían surgido iniciativas encaminadas a resolverlo”. Ahora, están preparando su primer curso centrado en desarrollo web front-end y, para principios de año, “lanzaremos el segundo curso alcanzando a un número mayor de alumnas”, sostiene Vázquez.
Además de los dos proyectos ganadores, hubo ocho finalistas:
"UTTOPY, de Inés Echevarría, es una marca de moda solidaria que, a través de su diseño, da visibilidad a causas sociales. Cada mes colabora con una ONG, creando una edición limitada inspirada en su causa, y haciendo difusión de la labor de la entidad.
Nuria Hijano, de AAITSME, cuenta que a los 26 se quedó calva por alopecia areata y eso cambió su manera de ver la vida. Se propuso inspirar y motivar a utilizar la enfermedad como herramienta para el cambio. Aaitsme ofrece pelucas customizadas, coaching terapéutico, eventos, workshops y retiros.
ANIMOSA, de Mónica Conde, se dedica al diseño, fabricación y venta de artículos (textil, papelería y regalo) basados en mujeres importantes de la historia.
WITHOUTREES, de Esther Escolano, ha desarrollado un nuevo material utilizando los residuos generados por las industrias de la piedra natural. Se trata de un papel autoadhesivo que ni es papel ni contiene adhesivo, que no daña las superficies y puede utilizarse cuantas veces se quiera.
TRIP&FEEL, de Sandra Merchán, apuesta por la ‘pescaturismo’, una actividad de ocio alternativo para turistas que generará ingresos extras a los pescadores y al ámbito local.
DONA CAFÉ, de Eva Espinet, ayuda a mujeres desfavorecidas o en riesgo de exclusión social, mediante la formación barista –experta en la preparación y servicio de café– para poder desarrollarse, trabajar y emprender en este sector.
QUIERO TRABAJO, de Vanessa López, es una fundación sin ánimo de lucro que asesora, instruye y viste a mujeres para que afronten con confianza y seguridad su entrevista de trabajo y consigan un empleo.
ABSORVALIA, de Mireia Montolio, centrada en diseñar y producir absorbentes textiles para personas con problemas de incontinencia, ya sea de orina, fecal, exceso de salivación...
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vía Soluciones innovadoras con impacto duradero