Fue a mediados de los 90 cuando la Empresa Nacional de Innovación, Enisa, dependiente del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad , inicia la línea de préstamos participativos. Desde ese momento, pero de forma especialmente intensa a partir de 2005 y hasta 2016, la entidad ha financiado 5.000 proyectos con un desembolso total cercano a los 800 millones de euros. Así lo puso de manifiesto, Mario Buisán García, presidente de Enisa, en el acto de presentación del nuevo informe de valoración del impacto económico y social de los préstamos, presentado el 19 de abril en el Centro de Innovación BBVA.
El experto en capital riesgo y catedrático de la UCM José Martí Pellón ha sido de nuevo el responsable de coordinar la ejecución del estudio en su cuarta edición. En esta ocasión, la pretensión era analizar el impacto económico y social de los préstamos concedidos a través del análisis del crecimiento de las empresas beneficiarias hasta el tercer año, desde la recepción del primer préstamo de Enisa y hasta el año 2014, valorando también la supervivencia y el éxito en el colectivo de empresas considerado. Bajo esta perspectiva, el alcance de la investigación incluye 2.309 préstamos de las distintas líneas del programa. No obstante, los datos obtenidos corresponden a 1.665 empresas, una muestra equivalente al 81% del universo, y que recibieron en conjunto 396,3 millones de euros.
Principales conclusiones
Aunque los interesados en consultar la totalidad de los resultados del informe pueden hacerlo a través de este enlace adelantamos aquí algunos de los principales resultados:
Creación de empleo: Las 1.665 empresas analizadas crearon 6.185 puestos de trabajo neto hasta finales de 2014, un 27% más que antes de recibir el préstamo. Esto supone una creación de 4 nuevos empleos por empresa.
El margen bruto de los 352,3 millones de euros de incremento hasta el tercer año, se alcanzaron 611,8 millones en 2014.
Fracasos: Un total de 536 empresas de las 1.165 analizadas no tenían continuidad a finales de 2014. La cifra equivale a un 32,2% de fracasos del total, un porcentaje, que según Martí Pellón, está muy por debajo de la media que se baraja en capital riesgo, que se sitúa entre en 50-60%.
Éxitos: 51 empresas de las analizadas mostraron una evolución sobresaliente, creando 7.847 nuevos empleos hasta 2014 (154 por empresa). También aumentaron sus ventas en una media de 32,8 millones de euros. También se identificaron otras 37 de alto crecimiento, aunque está aún por comprobar el cumplimiento de las expectativas.
Retorno de los préstamos: En relación con el coste, de los 421,7 millones comprometidos, en junio de 2016 ya se habían recuperado 197,9 millones (46,9%) por reembolsos del principal, sin contar con otros ingresos derivados de intereses, participación en beneficios y comisiones de cancelación anticipada. No obstante, hay que tener en cuenta que hay préstamos concedidos a 7-8 años.
En términos de coste-beneficio, el impacto global de los programas de préstamos analizados “puede considerarse como muy satisfactorio, cuantificado además los siguientes aspectos: Una inversión inicial, recuperada en parte ya, de 63.920 euros por empleo creado, que se reduce hasta 36.184 euros si se computa lo recuperado solo por reembolso del principal, un efecto multiplicador de la inversión en activos totales de 3,2 veces el importe prestado y un efecto multiplicador sobre los activos inmateriales de 0,9 veces el importe prestado.
Efecto certificador de los préstamos
Capítulo aparte, merece una investigación paralela sobre las empresas beneficiarias de los préstamos de Enisa con datos contables hasta 2012 al objeto de comprobar si las ayudas de la entidad abrían después puertas a otras vías de financiación. El universo aquí era de 694 empresas beneficiarias de un préstamo Enisa en el periodo 2005-2010. Los resultados obtenidos muestran que las empresas receptoras de los préstamos públicos tienen un endeudamiento a largo plazo un 31,5% superior al registrado por las empresas del grupo de control, siempre después de restar el préstamo vivo de Enisa. La conclusión es que "los préstamos de Enisa contribuyen a que las empresas beneficiarias tengan un mejor acceso al endeudamiento a largo plazo de entidades financieras, que es fundamental para sustentar un crecimiento sostenido. Y este efecto es mayor en las empresas más afectadas por los problemas derivados de la asimetría informativa: las más pequeñas y las pertenecientes a sectores de alta tecnología".
Testimonios
La presentación de las conclusiones del informe fue seguida por una mesa redonda que moderó Alberto Tornero, director del Área de Empresas de Alto Potencial y emprendimiento en la consultora PwC . Javier Castaño, cofundador de Agnitio (en proceso de desinversión), Eduardo Margallo, de MedLumics (en crecimiento), Sara Ramos, de Aura Innovative Robotics (en campaña de crowdfunding) y Luis París, responsable de Parclick (en claro proceso de expansión) fueron los participantes de las empresas en distintos estadios encargadas de testimoniar la importancia crucial que, en un momento determinado, supuso para la progresión de sus negocios el préstamo de Enisa. “Yo siempre digo que, de todas las financiaciones que hemos conseguido, la más difícil fueron los 50.000€ de arranque. Una apuesta que sólo se atrevió a hacer Enisa por lo que, si no fuese por ellos, creo que hoy no estaría aquí”, llegó a afirmar Luis París.
vía ¿Acierta Enisa en la concesión de los préstamos?